viernes, 6 de noviembre de 2009

TAPPERMAN - Ficha Técnica

Hola estimados lectores, despues de una larga ausencia (casi el doble del promedio), creo que lo mejor es dar la cara. Pero, como digo a veces, "dar la cara no alcanza para conocer al que escribe el blog" -Mentira, lo acabo de inventar recien, nunca digo eso-. Hoy les traigo a todos ustedes una ficha técnica sobre mi, para que puedan reconocerme quienes no me conozcan y para que quienes me conocen vean qué imagen tengo de mi mismo, al mejor estilo "Características de TAPPERMAN".

Aquí me encontraba, como cada mañana haciendo mis cosas, cuando me dije "Uy! el blog!!!", y recordé que lo tenia algo descuidado. Recurrí al nick del MSN para ver cuándo lo habia actualizado por última vez, y noté que hacía casi dos meses...
Así que espero me disculpen. Proximamente volveré a mis anécdotas, pero sucede que me di cuenta que mi dia consta de 6hs. (desde que salgo a las 16hs del trabajo, hasta que me acuesto a las 22hs, que generalmente se estiran hasta las 23). Si a eso le descontamos el tiempo que le dedico a la facultad y a mi vida cotidiana, realmente no me queda mucho tiempo para ponerme a escribir para el blog.

Espero si me ven por la calle me saluden.

martes, 4 de agosto de 2009

LA PROFECÍA DEL NO NACIDO (UNBORN)

- Cuanto más creativa es la ficción, más nos sorprende la realidad -

Antes que nada, voy a decirles a quienes llegaron aquí buscando la película, no prosigan leyendo porque algunos detalles de la trama serán develados durante la narración.

Caía la madrugada de un sábado cercano al día del amigo. Decidimos juntarnos todos en pleno estado de sitio por la gripe A, emm... quiero decir, en plena semana pico. Como pocas veces, nos juntamos en mi casa. Éramos alrededor de 10 personas.

- Vamos a ver una película - Sugerimos. No había muchas opciones, ya que yo tenía un poco de sueño, del frío era considerable, el sueño lo podía a mas de uno, los boliches eran un pase gratis al contagio de la pandemia y el sueño me estaba ganando. Por si no quedó claro: YO TENÍA SUEÑO.

Habíamos alquilado una de comedia y una de suspenso. Pero la elección fue ver una de terror. UNBORN. Podríamos haber hecho cualquier cosa, pero teníamos que elegir esa película. Sino, hoy no habría anécdota.

Nos disponíamos a verla y estábamos bastante compenetrados en la película. Yo ya la había visto, pero la vez anterior, tenía mas sueño todavía y tuve dos siestas de 20 minutos en el medio... Cuestión que mas o menos la tenía, pero podía verla de nuevo con el mismo entusiasmo que si no la hubiera visto.

Comienza la película. El fantasma de un niño acecha a una ch
ica, hace ruidos extraños para llamar su atención y le pega el susto cuando se le aparece, con la frase "Jumby quiere nacer ahora" (medio salame este Jumby porque parece ser que no sabía que en el mejor de los casos tenía que esperar nueve meses). Habían pasado 15 minutos cuando llegaron los últimos dos invitados Andrei y Dai. En un completísimo resumen Deb les contó lo que llevábamos visto de la película. Y estábamos todos pendientes de lo que sucedía.

De repenté se oyen golpes en un vidrio. Pensé "carajo, esto no lo recordaba!!" al mismo tiempo que reaccionaba que los golpes provenían de la puerta de mi casa y no de la tele. Se levantó un murmullo entre todos los que estábamos reunidos. Intentando no pensar en la película, me dispongo a abrir la puerta, cuando veo que la sombra de la persona que había golpeado se iba. Me sonó raro.
Miré disimuladamente por la ventana y estaba una mujer mayor caminando descalza hacia el cementerio (el cementerio está a aproximadamente una cuadra de mi casa). Lo primero que pensé fue "amenazaron a esta señora para que golpee en la puerta de mi casa y se vaya. Me quieren robar" pero la mujer precisaba ayuda, así que por si las dudas cargué dos armas potencialmente letales: el gas pimienta, el puñal del asado. Salí, delegando a mi hermana menor la tarea de despertar a mi viejo para que me ayude. Si, una vez mas el heroismo de TapperMan no es resolver las cosas solo, sino saber a quién pedir ayuda. A todo esto Snynph llamó a la plolicía, Nadia hablaba y nadie recordaba el número de puerta de mi casa.


Snynph quedó custodiando la puerta de mi casa mientras fuimos en la búsqueda de la señora que ya había cruzado la avenida de la esquina de mi casa y se dirigía hacia el cementerio. Antes de que me diera cuenta, Deb la había sostenido de un costado, mientras yo la sostenía del otro y mi papá le decía "tranquila, estamos con vos, me reconocés?". Mi viejo le dio el celular al Colo para que llame a las hijas de la mujer. Al oir el nombre de su hija, la señora gritó "mi hija!!" y tendió a desmayarse. Justo mientras tanto llegaba el patrullero de la policía. No me alcanzaban las manos para esconder el puñal. Subieron a la señora al patrullero, y yo me fui caminando con mi viejo y el Colo. Seguía tratando de esconder el puñal q era mas grande que cualquiera de mis bolsillos.

La situación se resolvió cuando llegó la hija de la señora y se hizo cargo de ella. Aparentemente la mujer había estado tomando mal la medicación. Lo más curioso del caso es parece ser que el primer hijo de la señora había fallecido. Tal cual como contaba la película. Como no podia ser de otra manera, nosotros terminamos suspendiendo la película y cambiandola por la de comedia. Ese tal Jumby terminó siendo conocido como Yummi, y cualquier acontecimiento era motivo de un chiste a mención de que se iba a aparecer. Fue algo digno de recordar... o mejor dicho, algo difícil de olvidar.

lunes, 4 de mayo de 2009

DESPISTE

Antes que nada, reconozco el tiempo que estuve sin actualizar, y es que las exigencias de la vida diaria a veces son demasiadas para una persona comun... Así que como yo soy el gran TAPPERMAN, y eso para mi no es excusa, mas vale me ahorro inventar motivos para disculparme cuando no los hay...
Esto es algo que nos pasa a todos. Pero a todos en su justa medida. A mi me pasa frecuentemente, y la verdad es que no está para nada bueno.

Cuando las destrezas físicas no son lo nuestro, nos quedan sólo las destrezas mentales, o intelectuales. Cuando uno es chico, estás destrezas no son valoradas, pero a lo largo del tiempo, los amigos, y gran parte del círculo social de uno, lo acepta como virtud.

Como siempre, primero uno tiene que aceptarse a sí mismo, y luego, por adhesión, los demás lo aceptan también. Ésto no significa que en vez de tener el trofeo de una maratón en la repisa, tengamos "La República" de Platón. Pero, a veces, manejar algunos conceptos tiene sus ventajas en diferentes ocasiones de la vida diaria. ¡¡¡Cuántos problemas habremos resuelto teniendo en cuenta el centro de masas!!! O las veces que hemos jugado al pool, y hacemos cadena pensando en las tangentes... La limamos groso cuando incorporamos algunos conocimientos...

Está bueno a veces sobresalir por esas cosas. Da un poco de satisfacción porque uno piensa, "ah, no era tan malo errarle al arco cuando iba a la escuela". Pero lo malo de que este tipo de habilidades sean las que mas se valoran de uno, hace que, cuando éstas se ven afectadas por alguna situación, resalten mas las idioteces que cometemos...

Ahí es cuando entra la anécdota de hoy. Resulta que estaba en la facultad, 4 días después de comprarme la moto. Llego, y resulta que había una charla, y debido a ésto, no teníamos clases. El profesor nos dijo algunas cosas sobre la materia, luego, el que quiso, se quedó a la charla, y el que no, se fue "pa' las casas". Como tengo otras actividades en la facultad, me dispuse a irme una hora después de que salimos del salón.

Cuando busco las llaves de la moto, ¡no estaban! La vida volvía a jugarme una mala pasada. Se aprovecha porque uno no le puede decir nada. Ahora que lo menciono, a veces parece que la vida se abusa de nosotros...

Pero bueno, como no me gusta irme por las ramas, continúo con mi relato. Comencé a buscar las llaves en el salón donde curso habitualmente, y en el otro salón al que había entrado, una y otra vez, y las llaves no aparecian.

Busqué en el trayecto desde donde estaba la moto hasta los salones, una y otra vez, y las llaves no aparecían. A todo esto, llamo a casa para que me alcancen el juego duplicado de llaves. Mi vieja se re-portó. Mi amigo J.B. miró la moto y dijo "a mi me salió $50 cambiarle la cerradura, a vos te debe salir $100". Se me esbozó una sonrisa al pensar que la jodita de la vida no saldría tan caro. Al ver mejor la situación, a la luz de la linterna (para quien no lo sepa, curso en el turno noche), me dice "uyyyy, esto está todo integrado, te va a salir bastante mas carito"... A lo lejos volví a oir las carcajadas de la vida. [¬.¬]

Pasé a preguntar por los salones, y por la cantina, una y otra vez, y las llaves no aparecían.
Pregunté a mis compañeros, una y otra vez, y las llaves no aparecían.(Ahí me di cuenta lo inútiles que son los celulares en un lugar donde las estructuras cortan todo tipo de señal).
Finalmente desesperado, y con media facultad al tanto de mi incapacidad para saber donde dejo mis cosas, me dirijo al último recurso: Ir a Bedelía a preguntar el teléfono del profesor para preguntarle si no había visto las llaves.

Entro a Bedelía...
TAPPERMAN: Hola, quiero saber el teléfono del profesor ETCÉTERA, de Comercio Exterior...
BEDEL: A ver... ETCÉTERA, ETCÉTERA... No, no lo tengo. Tengo el de LAND ROVER, el otro prfesor que da esa materia, lo querés?
TAPPERMAN: No gracias, es por un tema ajeno a la cátedra (ya le había dicho a tantas personas que se me habían perdido las llaves que no quería decirle a nadie mas).
BEDEL: ¿Pasó algo?
TAPPERMAN: (Difícil de convencer, como siempre) Si, perdí un juego de llaves.
BEDEL: Ah, vos sos el de las llaves!
TAPPERMAN: (sudando bronca y pensando "¿hasta vos te enteraste, man?" Si algo viaja mas rápido que la luz, son los chismes) Si.
BEDEL: Están acá. El profesor las encontró y las trajo. Eran unas llaves de auto?
TAPPERMAN: (No voy a explicar de qué son las llaves) Si. Gracias loco.

Después tuve que decirle a medio mundo que había encontrado las llaves, y dónde estaban... Y, si bien trato de moderar el lenguaje cuando escribo, los comentarios mas abundantes eran "¡Qué boludo!" y derivados de la expresión...

Fue muy fuerte para mi ego, aún lo está tratando de superar.
Ni hablar de las veces que me pongo loco buscando las llaves que tengo en el bolsillo, o el DNI que está en el piso, o cosas que tengo en la mano. Si... A veces busco cosas que ya encontré.

El despiste es un problema serio. Es uno de los defectos que mas me preocupan. Pero, supongo que el tiempo lo resolverá antes que me de cuenta :P

lunes, 12 de enero de 2009

Viaje a Chile (Parte I - "La ida")

Llegaban las 6.30 de la tarde y nos dísponíamos sobre la plataforma 11 de la Terminal de Ómnibus. Yo no tenía idea de lo que era hacer un viaje internacional así que estábamos junto con SNynph y su familia esperando a que llegara el colectivo. El viaje consistía en un primer tramo hasta Mendoza, un segundo tramo hasta Santiago de Chile y un tercer tramo de Santiago a Temuco, Lautaro.

Luego de presentaciones familiares y conversaciones varias se asomó un colectivo que decía "Fiesta de la Vendivia - Mendoza", y comenzamos a sospechar que podría tratarse de nuestro cole. Sospecha que confirmamos cuando leímos "San Nicolás-Mendoza" en el cartelito.

Subí al colectivo con ansias de sentir el aire acondicionado sobre mi, cuando lo que me encontré fue que prendían el aire al iniciar el viaje, así que al inicio fue algo sofocante... Despues las cosas se empezaron a enfriar. Una vez que ya estábamos a temperatura habitable, me llevé la sorpresa de que tenía algunos lujos a los que no estaba acostumbrado: Un sillón que parecía un colchón (forrado de cuero), una almohada, una frazada y un servicio a la habitación, que en este caso viene a ser como un "servicio al asiento". Pasaron una extraña película llamada Primeval, que a diferencia de lo que muchos estarán pensando, se traducia como "primitivo" y se trataba de un mostruo.

Escuché tantas veces "Gaseosa" con una fuerte tonada provinciana, a cualquier horario y en cualquier situación que cuando dijo "Estamos llegando a destino" hasta pareció ser un alivio.

Llegábamos a Mendoza. Mi reloj marcaba las 9. Dijeron "a las 10 sale el colectivo a Santiago de Chile". Estaba bien, sólo una hora. Cuando me fijo, en todos lados los relojes marcaban las 8. Mendoza no había corrido la hora como la presidenta impuesta, digo... electa (no por mi, aclaro) anunció que debía hacerse. En fin... en lugar de una hora, eran dos. Internet y Counter de por medio, partimos a Santiago de Chile.

Subimos la Cordillera y la vista era magnífica, salvo cuando el colectivo se inclinaba hacia afuera en las curvas al borde de los precipicios. El servicio del colectivo nos dio un alfajor, que para sorpresa mía, era de la misma marca que el colectivo!!... No es que no conozca del tema, pero me pareció algo un poco extraño, ya que las gaseosas y el resto de la comida no tenían ninguna marca de la empresa.


Llenamos las visas. Entre los datos que pedían, se escuchó que alguien dijo "Sexo: 10 puntos", pero los casilleros no daban como para completarlo asi... Llegamos a la Aduana de Chile: Prohibido entrar con productos animales o vegetales. No se por qué, nadie revisó los bolsillos. Luego de dos horas de espera, en 10 minutos nos fuimos de la frontera.

Bajamos de la Cordillera por una ruta que hacía una "S" con varias vueltas, y todas al borde del precipicio... otra vez. Ya yéndonos de Los Andes, vimos "Man On Fire", excelente película que hacía tiempo tenia ganas de ver: Un guardaespaldas al que le secuestran la protegida, pira mal, mata a medio mundo y la consigue de vuelta.

Llegamos a Santiago, y vuelta a retocar los relojes... 15 minutos de diferencia con Mendoza. ¿Alguien me puede explicar como es que si los husos horarios van de hora en hora según la capital del país, puede haber 15 minutos de diferencia entre una ciudad y otra, que están a escasos cientos de km una de otra?

viernes, 9 de enero de 2009

Historias en Bondi (Parte I)

Esto pasó algunos meses atrás. Algunos lo han leído, pero quiero contarlo en este lugar...
Resulta que como no me gusta depender del transporte público, he optado por la bici hace algunos años, y mas recientemente, por la moto.
El problema son los días de lluvia. Un día de lluvia, cuando tengo que recorrer grandes distancias, es lo mas puteable en mi vida actual.
Las calles son resbaladizas, y ni la moto ni la bici son buena opción. Es ahí cuando considero comprar un auto, pero aún me siento lejos de eso. Es que, ante los costos de un auto y sus beneficios, a diferencia del costo-beneficio de la moto, y tener q viajar en colectivo cuando llueve, me sigue gustando mas la idea de la moto. Todo esto si dejamos de lado mi "problema de dimensiones", que, de igual modo que me complica la adquisición de ropa, me complica la adquisición de un automóvil, porque algo barato no es algo donde quepan mis extremidades cómodamente...

En fin. Subo al colectivo, y como no tengo monedas de un peso, el colectivero me dice q no tiene para cambiarme, q le pida a los pasajeros. Entonces empiezo:
- Alguien me cambia dos monedas de un peso por un billete de dos?
Había solo 5 personas en el colectivo. Luego de unas paradas, con el colectivero mirandome feo, justo cuando estaba por poner carita de perro mojado, una señorita me cambió el dinero.
Pagué el boleto, y me fui a sentar.

A los dos dias vuelve a llover...

Benditos los dias de lluvia q fortalecen las cosechas del campo... pero malditos los q me obligan a viajar en colectivo.

Vuelvo a tomarme el mismo colectivo, en el mismo horario, y me dispuse a pagar el boleto. Afortunadamente, esta vez contaba con monedas de un peso.
Puse la moneda, y dos de cinco centavos (el boleto aún salía $1,10 - no sabemos por qué aún, pero no podía salir $1). No me tomó las moneditas. Las junto y pongo una moneda de 10 ctv. Tampoco me la tomó... máquina detestable. Finalmente, probé con dos monedas mas, y la última recien fue aceptada por la máquina.

Me dirijo a sentarme al primer asiento libre q veo (casualmente, delante de la señorita q me cambió el billete la otra vez), y encima de bancar el mal rato con la maquinola en cuestión, la señorita me dice
"No tenes suerte con los colectivos vos, eh?"
"No, no la tengo, muchas gracias por recordármelo..."

martes, 6 de enero de 2009

Entrevista Laboral (Parte II)

Antes que nada, quiero contarles a todos los que estan preocupados por mi salud, que no he respondido ninguno de sus miles de mails, pero que mis heridas de la caída del artículo anterior van sanando y ya casi ni se ven...

Ahora si: Hoy voy a relatar la segunda parte de mi entrevista laboral mencionada algunos meses atrás.
Muchos de ustedes se estarán preguntando cómo me habrá ido en esta excelente oportunidad laboral. Eso, suponiendo que a muchos de ustedes les importe. Se que su vida no gira en torno de lo que a mi me pasa, pero está bueno pensar que si, mientras nadie le haga saber a uno lo equivocado que está. Pero ya que estamos les cuento: En mi trabajo actual me encuentro muy a gusto, pero necesito tareas relacionadas con la carrera que estoy estudiando para poder recibirme. Hablé de esto con mi jefe, pero nunca volvimos a tocar el tema. Este posible nuevo trabajo me da esa posibilidad.

Han pasado varios días desde aquel 30 de septiembre (67 y contando...) en los que dia a día revisé mi cuenta de correo electrónico para ver si los entrevistadores habían tenido la gentileza de responderme. Como soy un tipo tolerante (a veces) no sólo contemplaba la opcion de recibir un mail diciendo :
- "Bienvenido a nuestra corporación, ha resultado elegido para el puesto"
sino que también consideraba posible que me escribieran diciendo:
- "Gracias por participar"
- "Suerte en la búsqueda de un próximo empleo"
- "Disculpe la demora, no pagamos la factura de Arnet y nos cortaron internet un mes"
- "Las patologías psicológicas halladas en los tests nos hicieron revocar su oportunidad de empleo"
A esta altura un "Feliz Año Nuevo, espere sentado" también hubiera sido bien recibido.

Como venía diciendo: el tiempo pasó y nunca más recibí un correo de esa empresa. Cómo juegan algunas personas con los sentimientos de los demás. A veces pienso que la gente que trabaja en recursos humanos debería tomarse 2 minutos para mandar un mail a los entrevistados diciendoles: "Bueno pibe, lo intentaste y fracasaste miserablemente", por lo menos para saber que no tenemos que seguir esperando algo que no va a llegar. Creo que aunque sea difícil el mal rato de saber que no fuimos elegidos es un gesto de gentileza. Hasta los chicles y las gaseosas eran mas gentiles...

A diferencia de todo lo que pensaba que podía encontrar, en mi bandeja de entrada sólo aguardaban los siguientes mensajes:
- "Opina sobre DIARIOS e INTERNET"
- "encontrá el tesoro y ganá un Samsung"
- "Opina sobre DIARIOS e INTERNET"
- "Opina sobre Marcas"

Luego de revisar todos y cada uno de estos mensajes, y viendo que el tema de la entrevista laboral no se ha vuelto a tocar, me pregunto algo que no tiene mucho que ver con el tema... ¿Vieron que los íconos de los mensajes de correo electrónico son sobrecitos, siendo que el e-mail ha provocado que miles de millones de sobres dejen de utilizarse? Tienen como icono un producto de la industria que ellos mismos boicotearon. Me pregunto si será como lucir el cadáver del enemigo para mostrar como lo han derrotado, o simplemente una ironía mas en esta vida...
Así que con respecto al tema de la entrevista sólo puedo decirles:"Esta historia continuará..."