miércoles, 26 de diciembre de 2007

A golpes se hacen los hombres

Todo comienza una tarde de Enero, en la que realicé la mejor compra de mi vida. No, no se trataba de una vivienda digna ni de un jean con descuento. Algo mucho mejor: La Moto. La necesitaba porque eso de pedalear 15km para ir y volver del trabajo hacía que a eso de las 7 de la tarde, el cuerpo comenzara a dormirse, sin importar qué materia estuviera cursando.Lo bueno de haberla comprado era que tenía un buen motor para manejarme en la ciudad y alrededores. Lo malo era que no tenia ni idea de cómo se manejaba.Y así fue que me animé y empecé a los saltitos, errando cambios y exagerando con el embrague.La cosa es que tuve cuatro experiencias inolvidables...
- Una noche de otoño, por las calles circulaba agua, y yo me iba al pueblo de al lado. Pasé sobre un charco de agua, y frené al ver que un inconsciente en un auto no respetaba mi derecho de paso. Como frené sobre el charco, la moto fue al suelo, y yo con ella. Nada grave, sólo se desvió el Farol. MORALEJA: Teniendo toda la calle seca, sobre los charcos de agua no se frena.
- Una tarde de humedad, los adoquines de la calle transpiraban. Una mala combinación de frenos y reacción marcaron mi vida (Y la moto): Inexplicablemente, me caí solo. Otra vez. Una raya bastante importante, y un farolito roto. MORALEJA: Lo sudado resbala.
- Habiendo reparado los incidentes, mientras volvía del trabajo patiné sobre una pasta que había en la calle. Esta vez fue sin intentar frenar... MORALEJA: Los camiones de fertilizantes son una mierda.
- Por último, la tarde antes de noche buena, estaba buscando nueces para ponerle a las masas que estaba haciendo en casa. Estuve fuera de mi casa por 10 minutos. Momento durante el cual Una lluvia de gotas gruesas se dignó a comenzar y a detenerse. Humedeció las calles que estaba transitando, y al frenar cerca de una esquina, la moto perdió estabilidad y volví a caer... MORALEJA: Si no tenés nueces para las masas, ponele cualquier otra cosa.

De chiquito tuve otros golpes, como los de la mandíbula en tres repetidas ocasiones. Siempre dejando la marca en el territorio (hablo de la sangre, no de ese otro líquido corporal que suele usarse para tal fin) que la dejaron torcida, como Stallone.
En fin... Si es cierto que "A GOLPES SE HACEN LOS HOMBRES", voy camino a convertirme en un Stallone en ROCKY...

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